Judía

La judia común (Phaseolus vulgaris L.) es originario de América del Sur, existen alrededor de 14.000 especies en todo el mundo, aunque solo una pequeña parte se utiliza en la cocina; tienen características y propiedades que varían de una zona a otra.

En el Parque Sirente Velino, y en particular en el Valle de Subequana, encontramos numerosas variedades autóctonas: las "judías" que, como su nombre indica, son grandes y tienen un sabor único; las alubias "cannellini", pequeñas, blancas, de forma casi cilíndrica, una de las cualidades más preciadas, y las "poverelli"; judías rojas de montaña y judías "pan", con un color blanco lechoso.
Las judías eran conocidos desde la antigüedad, griegos y romanos ya consumían esta leguminosa, pero eran variedades de Asia y África, como las judías de "ojos negros", de tamaño pequeño, de color claro con una mancha negra. Hoy las judías son consideradas un alimento de la cocina pobre y campesina, pero en el siglo XVI son los nobles quienes las presentan en las mesas y le otorgan un lugar de honor entre los variados y opulentos platos de los banquetes, además de ofrecerla como plato principal también como regalo en ocasiones especiales.